La espuma de los días
Sin adscribirse a ninguna tendencia y sin dejarse encasillar en ninguna escuela ni corriente, la obra de Boris Vian (1920-1959) puede resultar huidiza a la vez que cargada de una honda angustia vital, la angustia del tiempo destructor, del deterioro, de la muerte, a traves de un universo insolito, descabellado y fascinante.