Con las botas puestas
El padre de Estefan ha fallecido y le ha dejado en herencia su vieja perra y los cachorros que acaba de dar a luz. Pero los animales están muy enfermos y solo sobrevive uno. Este can es muy especial y meterá en un buen lío al protagonista al desatar la maldición que pesa sobre una princesa. Brujas, enanos y conjuros completan esta sorprendente y divertida aventura.