Narcocultura
necropolítica, capitalismo gore y ultraviolencia
Narcocultura necropolítica, capitalismo gore y ultraviolencia
A principios de los años ochenta la cocaína se convirtió en la mercancía más rentable del mundo. No era una sustancia nueva, se llevaba utilizando desde hacía casi un siglo, pero el sistema económico estaba cambiando y la sociedad lo hacía con él. La cocaína era la droga perfecta para un capitalismo que necesitaba cuerpos capaces de aguantar más, de producir más, de consumir más. La mano invisible del mercado temblaba por el mono. Desde entonces, este aumento del consumo ha incrementando también la importancia económica y social del narcotráfico.