Sueños y esperanzas
Años atrás, Piper Diamond se había insinuado a Kyle Masters, y, aunque a él le había costado mucho resistirse a la tentación de probar lo que ella le ofrecía, la había rechazado porque su honor le impedía aprovecharse de una chiquilla. Y ahora Piper había vuelto, embarazada, sin marido, y necesitando un padre para su hijo. Kyle seguía siendo el mismo hombre, leal e íntegro, es decir, exactamente el hombre de sus sueños. Pero convencerlo para contraer un matrimonio de conveniencia no le bastaba a Piper: Kyle Masters no solo era el hombre que le convenía, sino el hombre que ella deseaba...