Memoria y utopía La primacía de la intersubjetividad
La memoria y la utopía identifican dos disposiciones del sujeto, una vuelta hacia el pasado y otra hacia el futuro, siendo ambas actitudes críticas respecto al presente. La intersubjetividad define el eje central de la obra: la memoria es concebida como puente entre el pasado y el presente, entre el silencio y la palabra, entre lo singular y lo colectivo, y, en consecuencia, como una narración estructurada como forma de olvido individual y colectivo. La utopía es analizada en dos de sus formas históricas: como compromiso crítico con la cultura y la sociedad, restituyendo y haciendo posible el mantenimiento del estado de deseo en una comunidad no étnica (tal como la del 68 francés), y la formulación de una concepción del ser europeo que critica toda forma de eurocentrismo y reconoce la aportación del otro (ya sea por motivo de género o raza) como constitutivo de la cultura europea.