Corán, palabra y verdad Ibn al-Sīd y el humanismo en al-Andalus
La intervención de Dios en la historia por medio de un Discurso abajado, el Corán, fue esencial para la economía islámica de la salvación; pero también determinante en la constitución de la teología y la exégesis, así como en la elaboración del ordenamiento canónico y la visión del mundo. De ahí que, desde la perspectiva islámica premoderna, el acceso autónomo del creyente a cualquiera de los campos de la acción social y el pensamiento requiera el dominio de la lengua árabe. Fue en árabe como Dios comunicó su Mensaje, a través de un escogido entre un grupo histórico, el pueblo pagano de los árabes. El artículo coránico de fe según el cual Dios se sirvió de la lengua de los árabes permitió que se desarrollara la exégesis racional, como medio idóneo para acceder al Mensaje divino y actualizarlo. Y es en ese ámbito, el de las humanidades integradas en el saber religioso, tal como se habían desarrollado en Iraq durante los siglos III y IV H./IX y X J.C., donde se movieron los filólogos árabes medievales, entre ellos, el pacense Ibn al-Sid, (m. 521 H./1127 J.C .), el gran sabio andalusí de la palabra. La ubicación de Ibn al-Sid en la historia de la filología árabe y el análisis de los aspectos de su obra relacionados con el Corán, sobre todo la presencia de lenguaje figurado en este, nos permiten adentrarnos en los fundamentos del humanismo islámico, confluyente en muchos aspectos con la sabiduría estoica; generador de un valioso cuerpo de ciencia hermenéutica y lingüística, y alentado por un poderoso impulso ético.